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La radio burla la censura de Putin

La invasión de Ucrania por parte de Rusia es una guerra que no solo se está librando en el terreno, en las calles de Kiev, Jarkov, Odesa o en la devastada Mariupol. El conflicto también se está librando en los medios de comunicación, en las redes sociales y en todos los canales disponibles para difundir la información de lo que está ocurriendo en Ucrania.

Consciente de que en un mundo donde la información también está globalizada y de la importancia que esta tiene para que la opinión pública se posicione a favor o en contra de los gobiernos, Vladimir Putin también ha llevado el conflicto al terreno informativo. 

Lo primero que hizo fue prohibir y reprimir cualquier manifestación pública en contra de la guerra. El resultado ha sido más de 15 000 personas multadas o condenadas a penas de cárcel por mostrar su rechazo a la guerra. No contento con ello, Putin también ha querido controlar la información que difunden los medios del país y, sobre todo, la que difundían los corresponsales desde Rusia. Por ese motivo amenazó a los corresponsales de los medios internacionales con penas de hasta 15 años de cárcel por utilizar términos como invasión o divulgar noticias que el Kremlin considere que son falsas. Es decir, cualquier noticia que no esté en la línea de la versión oficial. 

Este medida ha provocado la salida de los corresponsales internacionales que han abandonado Moscú, porque resulta imposible ofrecer  información de calidad con la censura impuesta por Putin. El bloqueo ha llegado incluso a Facebook y Twitter, por lo que gran parte de la población, solo tiene una versión de lo que esta ocurriendo en Ucrania. Una versión que tiene poco de información y mucho de propaganda. 

Y ante este bloqueo informativo, la radio. Otra vez la radio. Una tecnología de finales del siglo XIX ha logrado zafarse de la censura impuesta por Putin para llevar información a la población rusa ¿Cómo? A través de la onda corta. 

La radio de onda corta es un tipo de transmisión de radio de largo alcance que logra que una emisión lanzada desde una parte de la tierra pueda llegar a otro punto a miles de kilómetros, utilizando como vehículo la ionosfera (una capa de la atmósfera ubicada a unos 160 kilómetros sobre la superficie terrestre, que tiene la capacidad única de poder reflejar ciertas frecuencias de radio). 

Radio Exterior de España acaba de cumplir 80 años. Comenzó sus emisiones en 1942 para llevar información a la población española repartida por el mundo. Pero desde hace años también ofrece información en inglés, francés, portugués, árabe, sefardí y ahora también en ruso. 

Así que, miren por donde, en pleno siglo XXI a Putin le ha salido un garbanzo en el zapato, con tecnología del siglo pasado y que no puede controlar. 

¡Viva la radio! ¡Viva el periodismo de calidad! ¡Viva la libertad de expresión!


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